La Cera Roja se presenta en forma semilíquida, con la consistencia de una cera líquida. Su color muy oscuro y su aroma a miel y frutos secos hacen que su aspecto sea aún más apetecible.
Su sabor es fresco, suave, embriagador. El aroma que desprende evoca olores suaves y dulces con toques de frutos secos tostados, lo que convierte a la Cera Negra en una experiencia sensorial única.